Szeged, ciudad del sur de Hungría situada a orillas del río Tisza, atrae con sus monumentos a muchos turistas europeos y americanos. Szeged se menciona por primera vez en documentos de 1183 por su gran importancia para el transporte y la producción de sal.
Hoy, la ciudad de 170.000 habitantes se caracteriza sobre todo por su ambiente universitario. Su actual imagen ecléctica se creó en el curso de la reconstrucción tras la gran inundación de 1879. Los palacios del centro de la ciudad, las amplias plazas y los parques, en particular, conforman el carácter de Szeged.
En el centro, Széchenyi tér, con su ayuntamiento modernista, es una de las plazas más bellas. Todos los años, en mayo, se celebra allí la gran fiesta del vino, con 150 vinateros. Durante estos diez días, unas 100.000 personas acuden a Szeged para degustar los vinos y escuchar a las bandas en varios escenarios. La fiesta del vino termina el segundo fin de semana con el Festival del Puente, durante el cual el puente de la ciudad se cierra a los coches y se transforma en una colorida milla de mercado. Junto a la plaza se encuentra Kárász utca, la zona peatonal de Szeged, donde se pueden encontrar varios cafés y pequeñas tiendas.
También merece la pena dar un paseo hasta la plaza Klauzál tér. Es especialmente recomendable para los aficionados al café, ya que allí se encuentra el Virág-kávéház, uno de los cafés más conocidos y grandes de Szeged. Como estudiante, por otro lado, no puedes perderte Dugonics tér y su edificio administrativo universitario de estilo Art Nouveau.
No muy lejos se encuentra otra plaza, probablemente la más famosa de Szeged, la Dóm tér (Plaza de la Catedral). Una vez al año se convierte en escenario del festival de teatro al aire libre, el Szeged Open Air Theatre. En julio y agosto, se levanta una gran grada en medio de la plaza, desde la que muchos espectadores pueden ver las distintas obras. La adyacente catedral de Szeged, el llamativo edificio que da nombre a la plaza, se construyó como iglesia votiva tras la mencionada inundación de 1913. Durante las obras quedaron al descubierto los cimientos de la torre medieval de Demetrio, que desde entonces ha sido renovada y puede visitarse. Un Panteón Nacional enmarca la plaza. Este panteón conmemora a destacadas figuras políticas y científicas de Hungría con bustos, estatuas y placas.
Los amantes del arte no deben perderse una visita al Móra Ferenc Múzeum. Situada en Roosevelt tér, la galería lleva el nombre del escritor húngaro y fundador del museo al mismo tiempo, Ferenc Móra. Entre otras cosas, alberga exposiciones sobre la historia temprana de la región, sobre la vida y obra de Móra, así como exposiciones cambiantes sobre bellas artes.
Otra cosa que no hay que perderse es un paseo por el río Tisza. A finales de verano se celebra allí durante cuatro días el Festival de Szin. Los SZIN (días de la juventud de Szeged) son un acontecimiento musical especial: grupos como The Cure ya han tocado allí. El festival se celebra en el lido Újszegedi Partfürdő, situado directamente en el río Tisza.